Este día el padre, Molina López,
presentó su renuncia como párroco de la Iglesia de Salcajá, luego de
protagonizar un escándalo por mantener una relación con una mujer.
El sacerdote dijo que el tiempo que se
retira es para reflexionar sobre sus acciones, se mantendrá en oración,
“estaré en un retiro espiritual para reconciliarme con Dios”, justificó,
sin embargo el tiempo es indefinido.
Aseguró “Estoy arrepentido y pido perdón
a lo todos los feligreses, especialmente a los de Salcajá. Les ofrezco
ser mejor, prometo que después de esto seré una mejor persona. Me voy a
apegar más a Dios”, dijo una conferencia.
En cuanto al escándalo refirió que está
arrepentido, “reconozco que es un error, pero estoy asumiendo mi
responsabilidad”, indicó.
El sacerdote tiene 12 años de ejercer su vocación, antes de estar en la Parroquia de Salcajá, hizo una maestría en Roma.
Aseguró que ha hablado con la mujer con quien lo involucran, “hemos platicado por órdenes del obispo”, finalizó.
Por su parte, Mario Alberto Molina
Palma, arzobispo de de La Metrópoli de Los Altos, explicó que la
renuncia será efectiva el próximo lunes, se trasladará a la parroquia de
Momostenango, Totonicapán, no como párroco, pero podrá prestar algún
servicio sacerdotal, explicó el arzobispo.
Aseguró que los señalamientos contra el
religioso son por haber besado a una mujer en un restaurante, por eso
el sacerdote deja el cargo por tiempo indefinido.
Esta semana un grupo de feligreses
participó en una vigilia frente a la parroquia San Luis, en Salcajá,
para expresar su descontento contra el referido sacerdote.
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