#5 Come fibra
El consumo de fibra es esencial para que tu sistema digestivo funcione adecuadamente. Este nutriente ayuda a eliminar los desperdicios del organismo, baja los niveles de colesterol, nutre a las bacterias saludables de nuestro cuerpo y reduce las posibilidades de sufrir el síndrome de colon irritable y de desarrollar cáncer de colon. Las principales fuentes de fibras son las frutas, las verduras, los frutos secos y los frijoles.#4 Consume pescado
El omega-3 del pescado es muy beneficiosos para el sistema digestivo. Así, las propiedades antiflamatorias de este ácido graso ayudan a prevenir muchos problemas digestivos. Por esta razón, procura comer de 3 a 5 porciones de pescado -como salmón, atún o sardinas- por semana. Ten en cuenta que también puedes encontrar al omega-3 en las nueces, las semillas de lino y la soja.#3 Elimina la comida chatarra
La comida chatarra -además de ser una bomba calórica- es muy difícil de digerir. Por este motivo, hace que el sistema digestivo se esfuerce innecesariamente. Ahora que conoces esta realidad, ten consideración con tu cuerpo; escoge alimentos que sean más amigables y fáciles de procesar, como los productos orgánicos.#2 Come bien
Dedícale tiempo a comer, no engullas los alimentos. La digestión comienza en la boca; por este motivo, es importante que mastiques bien todo lo que introduces en ella. Solo así, las enzimas de tu saliva podrán descomponer los carbohidratos. Por otro lado, asegúrate de no comer en grandes cantidades; sobre todo, cuando te estas por acostar.
#1 Hidrátate
Las bebidas con cafeína, como el café o los refrescos, suelen irritar al estómago y atentar contra su salud. Por eso, procura reducir su consumo y, en su lugar, bebe agua. Tómala en grandes cantidades; esta impedirá que tengas problemas de estreñimiento y facilitará el proceso digestivo.Incorpora estos hábitos saludables a tu vida. Son cambios simples que mejorarán notoriamente tu calidad de vida. No pierdas tiempo, tu cuerpo te lo agradecerá.